Ya entonces tenía el hábito de escribir las cosas importantes y más tarde, cuando se quedó muda, escribía también las trivialidades, sin sospechar que cincuenta años después, sus cuadernos me servirían para rescatar la memoria del pasado y para sobrevivir a mi propio espanto,,,
jueves, 24 de marzo de 2011
Steady, as she goes.
Eh!Escucha! Cuando tengas edad de afeitarte me llamas!
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