Las fotos son lo más parecido al registro de un mínimo, casi nada. Un intento de nombrar como algo a conexiones inestables de elementos. Un concepto de hábitat que se desarma y una energía condensándose alrededor nuestro, casi tan fría como la falta de una casa. Los grandes planos de fotos parecen expandir el terreno donde se libran los combates. Entre aquellos que pasaron y formaron las imágenes y quienes transitamos la obra ahora. Ambos no encontraremos aquí un refugio y es vano tratar de buscarlo.
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